En los últimos meses, el Covid-19 ha introducido retos nuevos en la vida diaria de las personas. Para quienes gestionan almacenes u otras instalaciones de almacenamiento, mantenerlos limpios y desinfectados es una tarea compleja.
Es complicado mantener una limpieza óptima en espacios grandes con un gran número de personas y mercancías entrando y saliendo. Sin embargo, la limpieza y desinfección de almacenes debe colocarse entre las primeras prioridades de la empresa ya sea del sector logístico o no.
Mantener un almacén limpio y desinfectado es fundamental para la salud de los empleados, la productividad y eficiencia de la fábrica y la propia empresa.
Limpiezas de Almacén Periódicas y Profundas
Según el tipo de negocio, el almacén necesitará limpiezas periódicas y una limpieza profunda cada cierto tiempo.
Para acabar con la mayoría de virus y bacterias, deberemos usar un producto de limpieza adecuado con un contenido de alcohol de al menos el 70%.
Cada pocos meses, o incluso una vez al mes, dependiendo del negocio, el almacén acumulará suficiente suciedad como para poder a afectar a la productividad, la seguridad y la eficiencia dentro de la cadena de suministro. Antes de que eso pueda ocurrir debemos realizar una limpieza profunda del mismo.
Servicio de limpieza interno o externo
Si optamos por un servicio de limpieza externo es mejor programar la limpieza profunda durante las noches o los fines de semana, para que los trabajos de limpieza no interrumpan el trabajo realizado durante el día.
Si hacemos uso de personal interno asignaremos un área a cada persona o equipo. Les pediremos que registren cuánto tiempo y qué tareas fueron necesarias realizar, de esta forma podremos organizar mejor y optimizar el trabajo en futuras ocasiones.
¿Cómo realizar la limpieza del almacén?
Para limpiar y desinfectar a fondo un almacén prestaremos especial atención a las áreas de mayor trasiego y contacto, como pomos de puertas, barandas, mesas de trabajo, baños y elementos del mismo…
Este primer paso será limpiar la suciedad para que los productos químicos más potentes puedan hacer un mejor trabajo de desinfección.
Agua templada, un paño y jabón son herramientas útiles en este primer paso.
Debemos asegurarnos de que la superficie quede perfectamente seca antes de continuar con el siguiente paso.
La mejor forma de desinfectar completamente nuestro almacén es siguiendo rigurosamente las instrucciones de los productos desinfectantes usados. Algunos productos recomiendan mantenerlos aplicados sobre la superficie a desinfectar durante algún minuto para mejorar su efectividad. Otros en cambio no podemos dejarlos aplicados porque pueden degradar dicha superficie. Por ello es importante conocer bien el producto ustilizado.
Los limpiadores deben utilizar un equipo de protección para manipular los productos químicos más agresivos.
Nunca debemos mezclar productos desinfectantes o de limpieza, como por ejemplo lejía y amoniaco, podría suponer un riesgo de intoxicación.
La limpieza en profundidad de las instalaciones del almacén es una de las formas más importantes para mantener a los empleados seguros y saludables. No obstante dicha limpieza también debe realizarse bajo óptimas condiciones de seguridad.
Los almacenes tienen maquinaria y dicha maquinaria necesitará de un dispositivo de bloqueo de seguridad para poder manipularla y limpiarla con seguridad.
Este sistema, utilizado en muchas industrias, protege a los trabajadores de posibles accidentes con la maquinaria o elementos peligrosos.
También es útil hacer uso de etiquetas o pegatinas con avisos de seguridad para informar a los empleados sobre el estado de determinadas áreas del almacén. Una etiqueta de seguridad puede señalar el voltaje de una pieza o simplemente indicar que el suelo del baño está mojado.
Cualquiera que sea el mensaje es importante transmitir la información de forma clara y llamativa.
Estas han sido algunas indicaciones a tener en cuenta a la hora de realizar la limpieza y desinfección de nuestro almacén logístico con ciertas garantías de seguridad.